ADICCIÓN A LAS NUEVAS TECNOLOGIAS
La adicción a las nuevas tecnologías es una “adicción comportamental”. Las nuevas tecnologías avanzan a un ritmo vertiginoso y esto genera grandes e importantes beneficios a la sociedad, pero también ha provocado cambios en muchos hábitos de nuestra vida que no resultan fáciles de asimilar y gestionar de una manera saludable.
El peligro no reside en la tecnología sino en la relación que establecemos con ella.
Ocurre con todos los avances tecnológicos que experimenta la humanidad, si se utilizan mal pueden ser peligrosos. En el caso de los juegos de azar, videojuegos o las redes sociales, se presenta un debate que tiene que ver con la propia salud de los usuarios. El modelo de negocio de este sector utiliza directamente nuestro sistema de recompensa para mantenernos atentos y enganchados, al igual que ocurre en las drogadicciones. Una droga puede que sea más potente y nociva para el organismo pero, ante una persona con vulnerabilidad psicológica, es relativamente fácil que experimentemos una dependencia a las redes sociales, los juegos de azar o los videojuegos.
Las nuevas tecnologías están siendo protagonistas de numerosos problemas psicológicos por el abuso o mal uso de ellas. De hecho, el “juego patológico o ludopatía” ya se considera un trastorno adictivo caracterizado por conductas problemáticas y falta de control de impulsos.
Las investigaciones y estudios científicos ya demostraban que las personas también pueden volverse adictos a conductas específicas, y esto se relaciona con diversos trastornos psicológicos y psiquiátricos. Nació así la adicción sin sustancia o comportamental, donde lo importante no es la actividad que se realiza sino la manera de relacionarnos con ella.
Los síntomas y criterios asociados a la “adicción sin sustancia” son similares a los de las demás adicciones.
Un comportamiento que cumpla estos criterios puede ser definido como adicción:
- Saliencia: es la excesiva preocupación por la conducta y la importancia que cobra en la vida de la persona. Se produce cuando domina los pensamientos, los sentimientos y las conductas.
- Modificación del estado de ánimo: sensación de alivio y experiencia subjetiva de bienestar cuando nos implicamos en la actividad. Realizamos la conducta con el objetivo de aliviar estados emocionales aversivos.
- Tolerancia: aumento de la frecuencia, la duración y el compromiso con la actividad para poder conseguir los efectos iniciales en el estado de ánimo.
- Abstinencia: es el estado psicológico y físico desagradable que se da cuando la conducta es reducida o prohibida.
- Conflicto o interferencia: descuidar otras áreas importantes de la vida por llevar a cabo esa conducta. Estudios, trabajo, familia, casa, dinero, vida social, intereses, aficiones, etc.
- Recaída: es el intento fallido de eliminar o controlar la conducta, volviendo a patrones iniciales o extremos.
Podemos ayudarte a superar cualquier adicción “sin sustancia” que esté interfiriendo en tu vida personal y/o profesional con nuestra terapia para las adicciones en Murcia y online.